A dos años de prisión fue condenado un ex policía, a quien la justicia lo halló culpable por los delitos de violencia familiar y maltrato de menor. El condenado es Gregorio Arturo Cáceres, un ex sub oficial de la Policía nacional, quien, si bien no irá al Penal de Tacumbú, deberá cumplir una serie de obligaciones que le impuso el juez Oscar Delgado.

La decisión judicial sostiene que Cáceres no podrá abandonar el país, ni contactar con su esposa y su hijastra, además deberá presentarse a comparecer trimestralmente ante el Juzgado y donar obligatoriamente cien mil guaraníes mensuales a la escuela Guadalupe.

La resolución firmada por el juez Delgado menciona, también que el ex uniformado deberá seguir un tratamiento psicológico.

Los antecedentes señalan que el 1 de enero del 2007 su esposa Migdonia Villalba de Cáceres radicó una denuncia debido al constante maltrato físico y psicológico al que la sometía a ella y a su hijastra, y que incluso en una ocasión intentó asfixiarla con una almohada.

El juez Delgado aclaró en su resolución que Gregorio Cáceres actuó en total conocimiento de la antijuricidad de su conducta al momento de la comisión del hecho, siendo capaz de determinarse conforme a ese conocimiento. Señala, además que no demostró en la presente investigación alguna actitud eximente de su reproche.