10 DE DICIEMBRE DE 2009
61 AÑOS DE SU DECLARACION UNIVERSAL POR LA ONU
A criterio del ministro Núñez existen aun barreras que impiden el respeto pleno de los derechos humanos
El ministro de la Corte Suprema de Justicia y responsable de la Dirección de Derechos Humanos de la máxima instancia judicial, doctor Víctor Núñez resaltó que a nivel de Latinoamérica aun queda mucho por hacer para lograr, el respeto pleno de los estos derechos, debido a las barreras que se presentan. Sin embargo, sostuvo que en Paraguay la Constitución nacional, prevé en varios de sus artículos el respeto de la dignidad humana y a los derechos del hombre. Fue durante el acto de conmemoración de los 61 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos por las Naciones Unidas y que se desarrolló en el Poder Judicial.
Dando apertura del acto de conmemoración del aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos por la ONU, desarrollado en el Palacio de Justicia, el ministro de la Corte Suprema de Justicia y responsable de la Dirección de Derechos Humanos del mas alto tribunal del país, doctor Víctor Núñez, resaltó que en Latinoamérica aun queda mucho por hacer para lograr que los derechos fundamentales del hombre se respeten, ya que existen varias barreras que impiden lograr este objetivo. Sin embargo, sostuvo que a nivel local, la Constitución nacional prevé el respeto en varios de sus artículos, ubicando al hombre por sobre el Estado.
“Hasta hoy, a 61 años todavía tropezamos con muchas barreras, especialmente en algunas partes del mundo y en Latinoamérica, donde todavía tenemos trabas, barreras casi infranqueables para ubicar al ser humano en el lugar que le corresponde. Nuestra Constitución, mas que ninguna otra, le da un lugar de preeminencia al hombre, poniéndolo por encima del Estado” apuntó, el ministro Núñez.
Al respecto, sostuvo que la Corte, desde hace varios años cuenta con una Dirección sobre la materia que trabaja en 17 áreas que hacen a los derechos humanos. “Por supuesto el respeto de los derechos humanos tiene que ser no solo de los magistrados, sino de todo funcionario público y de todas las personas, porque si no tenemos en cuenta en la administración de la justicia lo relacionado a la dignidad del hombre no se puede hacer justicia” manifestó, el doctor Núñez.
Agregó que el ámbito en donde más se violan estos derechos es en el judicial, pero que el caso se da no solo en Paraguay sino en varias partes del mundo, sobre todo en lo que hace al acceso a la justicia y al debido proceso.
Por su parte, Fabián Forestieri, presidente de Amnistía Internacional, capítulo Paraguay señaló que la violación de los derechos humanos también se refiere a la mala distribución de la riqueza, a las muertes que se registran y que son prevenibles, las condiciones infrahumanas en que viven millones de personas en el mundo y la exclusión de las que son víctimas.
Asimismo, reclamó que en Paraguay las últimas secuelas del régimen militar siguen presente y que el Estado es ineficiente a la hora de exigir rendición de cuentas de sus actos a los responsables de ejecuciones extrajudiciales, violaciones, torturas y desapariciones forzosas., así como los secuestros con fines políticos y económicos.
Según estadísticas de Amnistía Internacional en Latinoamérica y el Caribe existen más de 70 millones de personas que sobreviven con menos de un dólar por día, a nivel mundial cada un minuto muere una mujer durante el embarazo y el parto, mil millones de personas viven en asentamientos precarios, alrededor de 963 millones no tienen que cenar, 2.500 millones no tienen acceso a servicios sanitarios y 20 mil niños y niñas fallecen anualmente por desnutrición.
Presentaron una obra
Por otro lado, durante el acto de conmemoración, la abogada Romina María Paiva Godoy, funcionaria de la Dirección de Derechos Humanos presentó su libro titulado: “Los Casos Paraguayos ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos”
La obra es una reseña de los litigios presentados ante los tribunales nacionales e internacionales y la participación en organizaciones no gubernamentales destinadas a denunciar las agresiones masivas o puntuales de los derechos básicos de los seres humanos.
De acuerdo a la abogada, el libro es producto de una profunda investigación realizada sobre los derechos humanos en nuestro país en tiempos de la dictadura stronista.