El empresario Víctor Lobo Corbeta dueño de la empresa de seguridad privada Comando, aceptó entregar 161 armas de guerra que fueron incautadas en su residencia y pagar una multa para evitar ir a juicio oral, la situación será resuelta por el juez penal de Garantías, Hugo Sosa Pasmor.

Ayer se llevó a cabo la audiencia preliminar del proceso abierto al empresario Lobo por reducción y acopio de armas, durante la misma, el fiscal de la Unidad Anticorrupción, Arnaldo Giuzzio, propuso una alternativa para que el procesado no vaya a juicio oral y público. El juez Sosa Pasmor dispuso un cuarto intermedio y hoy resolverá el caso, para que la fiscalía tenga tiempo de presentar la lista de elementos que serán decomisados. 

El agente del Ministerio Público aseguró que la pena no supera los 4 años de cárcel y el proceso podría concluir con la imposición de una multa por valor de 15 millones de guaraníes y la entrega de armas, cargadores, granadas y explosivos, que fueron incautados durante un allanamiento en la vivienda del empresario, en el año 2006.

El procedimiento fue realizado conjuntamente por el representante del Ministerio Público, agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y de la Dirección de Material Bélico (Dimabel). Se presume que el armamento fue robado en Bolivia y traído al Paraguay, donde fueron comprados por Lobo Corbeta, quien según los investigadores sería una persona que no se dedica al tráfico de armas.