El primer mandatario, Horacio Cartes, encabezó el acto de conmemoración en las trincheras de Curupayty, en el distrito de Humaitá, del cual también fueron partícipes la titular de la máxima instancia judicial, doctora Alicia Pucheta, autoridades nacionales, representantes diplomáticos e invitados especiales. 

En su intervención el ministro de Defensa Nacional, Diógenes Martínez, señaló que este acto solemne de recordación de la importante gesta busca promover y apoyar las actividades históricas culturales que refuercen la identidad nacional. 

Por su parte, el presidente de la República, ante los hechos históricos acontecidos, trajo a colación las palabras del papa Francisco, señalando que "el pueblo que olvida su pasado, su historia, sus raíces, no tiene futuro, es un pueblo seco”. Destacó la figura de tres mandatarios como el doctor Gaspar Rodríguez de Francia, Carlos A. López y el mariscal Francisco Solano López. 

En tanto, el coronel Roberto Olmedo fue el encargado de trasladar a los presentes a aquel día, relatando los hechos acontecidos y un simulacro con cañón y balas de salva para recordar tan importante batalla de la historia paraguaya. 

Luego de depositar una corona de laureles y descubrimiento de una placa recordatoria, la presidenta de la máxima instancia judicial, Alicia Pucheta, acompañó al primer mandatario y autoridades a un recorrido por las trincheras. 

La Batalla de Curupayty, combate librado por las tropas paraguayas contra la Triple Alianza de Brasil, Argentina y Uruguay, para los historiadores representa la mayor victoria de las fuerzas nacionales de la guerra que se extendió hasta 1870. Las tropas paraguayas estaban comandadas por el general José Eduvigis Díaz. 

Fuentes históricas indican que el desenlace de esta contienda dejó como saldo unos 10.000 aliados muertos y 92 bajas paraguayas. Fue la mayor victoria del ejército paraguayo en dicho conflicto.